La validez del papel de seda suele ser de 2 a 3 años. Las marcas legítimas de papel de seda indicarán la fecha de producción y validez en el paquete, que está expresamente estipulada por el Estado. Almacenado en ambiente seco y ventilado, también se recomienda que su validez no supere los 3 años.
Sin embargo, una vez que se abre el pañuelo de papel, queda expuesto al aire y será analizado por bacterias de todas direcciones. Para garantizar un uso seguro, el papel de seda debe consumirse dentro de los 3 meses posteriores a su apertura. Si no puedes utilizarlo todo, el resto del pañuelo lo puedes utilizar para limpiar cristales, muebles, etc.
Además, el papel de seda en sí tendrá más o menos colonias de bacterias; una vez abierto y en contacto con el aire, en un ambiente húmedo las bacterias crecerán rápidamente y luego volverán a usarse, lo que puede generar riesgos para la salud. Especialmente el papel higiénico, el contacto directo con las partes privadas y el uso prolongado de papel de seda caducado pueden provocar inflamación ginecológica micótica y enfermedad inflamatoria pélvica.
Por lo tanto, además de prestar atención a la validez del papel de seda, también debes prestar atención al entorno en el que se conservan y a cómo se utilizan. Si descubre que al papel de seda le empiezan a crecer pelos o pierde polvo, no debe continuar usándolo, ya que esto puede ser una señal de que el papel de seda está húmedo o contaminado.
En general, la sustitución del papel de seda no sólo debe depender de si ha caducado o no, sino también de su uso y estado de conservación. Por el bien de su propia salud, se recomienda reemplazar el papel de seda con regularidad y mantener el entorno de almacenamiento seco y limpio.
Para determinar si es necesario reemplazar el papel de seda, puede considerar principalmente los siguientes aspectos:
Observe el aspecto del papel de seda: en primer lugar, compruebe si el papel de seda está amarillento, descolorido o manchado. Estas son señales de que el pañuelo de papel puede estar húmedo o contaminado. Además, si al tejido le empiezan a crecer pelos o a perder polvo, también indica que el tejido se ha deteriorado y no debe utilizarse más.
Huele el pañuelo: El pañuelo normal debe ser inodoro o tener un ligero olor a materia prima. Si el papel de seda desprende un olor a humedad o de otro tipo, significa que es posible que se haya deteriorado y deba ser reemplazado.
Considere cuánto tiempo ha estado en uso el pañuelo y cómo se ha abierto: una vez que se abre un pañuelo, puede verse afectado por bacterias transmitidas por el aire. Por lo tanto, si los pañuelos de papel han permanecido abiertos por un período de tiempo más largo (más de 3 meses), se recomienda reemplazarlos por otros nuevos, incluso si no se notan cambios en su apariencia.
Preste atención al entorno de almacenamiento del papel tisú: el papel tisú debe almacenarse en un lugar seco y ventilado, lejos de la luz solar directa. Si el papel tisú se almacena en un ambiente húmedo o contaminado, se recomienda reemplazarlo con anticipación, incluso si no se ha abierto, para evitar la humedad o la contaminación del papel tisú.
En general, para garantizar la seguridad e higiene del papel de seda, es aconsejable comprobar periódicamente su aspecto, olor y duración de uso, y sustituirlos por otros nuevos cuando sea necesario. Al mismo tiempo, preste atención al entorno en el que se guarda el papel de seda y cómo se utiliza para evitar la humedad o la contaminación del papel de seda.
Hora de publicación: 23 de agosto de 2024